Bueno, intentaré aquí ir mostrando todo lo relativo a su restauración sin perder detalle de algo aún más valioso, la gente que comparte esto de corazón.
Una vez cerrada la compra comienzan los preparativos concernientes a la logística del viaje, luego de averiguar bastante descartamos el acarreo por grúa o camión por los altos precios, asi que me puse en campaña para conseguir un trailer grande y a los pocos días un amigo (gracias Pablito!!!) me consigue uno de su suegro de 6 metros de largo, lo vimos con los muchachos por foto y me convencieron de intentarlo, la ecuación era la siguiente: mucho más barato, pero sobre todo un viaje impredecible, único, cargado de misterio y dudas, al menos para mi personalmente.
Así fue entonces, recluté inexplicablemente (sobre todo por mi torpeza e insignificancia física) a los secuaces indicados, Arley (el dueño del Ambassador 990 que va a los encuentros), Lagui (Agustin, el niño que soñaba con el autometer en la TS), Torino22 (Juan, simplemente un tipo muy chiflado...pero genial), Juancito (su cuñado, quizás más chiflado aún) y Bologna (Maxi o El Pela, creo que el más tronado de todos por ser responsable de encontrar soluciones a todo inconveniente), todo en el búnker de éste último. Pasión y entusiasmo exacerbados.
El viernes entonces comenzaron las tareas de instalación de lo necesario para dotar a mi TS azul de los accesorios indicados para que cargue con el trailer de más de 6 metros de ida y vuelta, bocha, extensión del seguro, patente, y fierros varios.
El trailer estaba en Atalaya, 100 kms de Capital, y quedé en levantarlo al mediodía, cosa que no ocurrió porque para comenzar llegué tarde al taller y desprovisto de toda idea de cómo comenzar las cosas, enseguida Bologna metió mano, llegó Arley, Torino22 via celular ordenó hacer un asado y hostigar a Lagui que no pudo zafar de su trabajo y apareció a las 17 hs. Terminamos con él levantando el trailer cerca de las 12 de la noche, y partimos al encuentro del safe-car en el acceso oeste, sin cenar y cansados.
En el safe-car iban Torino22, Bologna y Juan, Arley tuvo que bajarse lamentablemente.
El viaje de ida fue tranquilo por ser completo de noche, íbamos acostumbrándonos al manejo del dinosaurio que llevábamos atrás y tratando que no nos paren en ningún control, teníamos casi todo en regla pero no todo todo, el amanecer fue hermoso en colores y llegamos a Santa Rosa cerca del mediodía, no antes de tirar cerca de 200 fotos y parar a reponer nafta en la TS que exigía más de lo habitual.
LLegamos, y fuimos directo con Darío a ver la 380 que dormía tapadita en un garage del centro, lo cual complicó bastante la cosa porque no podíamos llegar bien con la TS y el trailer detrás.
La vimos, y la efusión torinera fue completa, muy gastada como era de verse en las fotos pero con un casco que vale el esfuerzo levantar, y completa en sus accesorios e interiores, la terminamos sacando a empujones un par de cuadras hasta donde estaba más cómodamente esperando la TS su noble tarea. De paso tuvimos la suerte de que pudiera cruzarse Lisandro a saludar y dar una manito, gracias Lisandro!
La montamos en el trailer y de vuelta a la casa de Darío a buscar el motor y demás cosas. Acá ya empiezan las caras sucesivas de la gente que nos cruzaba en la calle, asombro y muchas risas de ver un Torino siendo remolcado por otro Torino, la composición estaba, el fotograma comenzaba a rodar.
Los chicos comenzaron a atar la 380 al remolque por todos lados, desinflar cubiertas y alguno incluso llegó a intentar hurtar accesorios como calcos, tapa de batería, etc, todo esto mientras yo me las rebuscaba para no transpirar nada en los más de 30 grados insoportables que hacía.
Cancelamos el asado del mediodía que estaba previsto para no llegar tan tarde a Buenos Aires y partimos directo sin más que darle alimento a la bendita TS que parecía recién llegada de perderse en el desierto, comía y comía nafta...
La cola de la TS quedó muy bajita con la 380 sobre el trailer e hizo que no se pudiera nunca más llenar el tanque por completo, por lo que se cargaba lo que entraba y se hacían aproximadamente 150 kms y de vuelta a cargar nafta, reponer bebidas y tirar fotos, revisar/ajustar bulones, etc.
El viaje fue muy cansador, sobre todo para Lagui que lo hice manejar toda la vuelta, pero no nos podemos quejar, llegamos bien, nos reímos mucho, contagiábamos pasión del que tenía en cada momento, nos quisimos fajar más de una vez, me pregunté qué caraj...hice cerca de diez veces, me convencí de lo hecho cerca de cien veces, le prendimos velas a la TS, nos diveritmos con los mil bocinazos y risas que despertamos en la ruta y por fin llegamos a casa a eso de las 12 de la noche.
Hoy la coupe 380 descansa a la vuelta de mi casa muy contenta de ser pronto puesta en proceso de resucitación, que comienza mañana mismo con el block y las cositas del vano motor con la ayuda invalorable de Maxi, como también de Lagui, Torino22 y Juan. A todos ellos les estoy eternamente agradecido, me bancaron de onda, de un día para el otro, me alentaron y se bancaron su propio viaje sólo por vivir esa locura de hacer viajar una 380 arriba de una TS.
La estética del auto quedará para otro momento, la iré planificando en la medida que pueda hacerlo y de a poco, sin descuidar la TS, tiempo hoy hay, y tengo muchas ganas de vivirlo así, sin verdades absolutas, como diría Lispector, con mi propia y pequeña verdad, apenas este momento, este tiempo.
Escribí mucho y lo sé, pero lo hice porque así lo quiero y espero que alguno se sienta bien al leerlo, se contagie y conozca gente que lo pueda ayudar, como a mi me pasó.
Ahora las fotos, iré subiendo muchas en tramos, hay de todo tipo, pero antes lo más importante,
Gracias: Lagui, Bologna, Torino22 y Juan, amigazos de fundición, irrompibles, de verdad que sin ellos hubiera sido un sábado más.
Gracias: a las esposas de todos por dejarnos "jugar como chicos apasionados" según rezó mi concubina; menos Lagui que no termina de concretar aún...

Gracias: a la preciosa TS 1974 que no se quejó ni una vez, no pidió más que nafta (aunque fue mucha, a ver quién adivina la cifra), no se movió un pelo de ella, hestoica bancó a cuerpo el rescate, cada día anda mejor, un verdadero autazo.
Gracias a todos los que desde acá colaboran para generar estas cosas tan intensas, abrazo,