Nadie pensaba que los dos principales candidatos a llevarse esta divisional, llevarían a cabo el carrerón que se mandaron. No se pudieron sacar ventajas en todo el trayecto. Estamos hablando del por entonces joven Luis Rubén DI PALMA, y el "maestro", Eduardo José COPELLO. Los dos acapararon la punta durante los 200 kms. de carrera, salgo un fugaz paso por la misma de otro dúo espectacular: GRADASSI y PERKINS.
Apenas 16 autos se presentaron en parque cerrado, lo que le daba la razón a la CADAD, sobre la decisión de eliminarla a fines de 1970, de los calendarios nacionales.
Largada la carrera, se desató la lucha sin cuartel entre GRADASSI, DI PALMA y COPELLO. A la expectativa se mantenía PERKINS, quién gracias a la "mano" de ZURITA, tenía la punta en el camino. Así en la primera pasada COPELLO tenía la punta en los relojes, hasta que sorprendiendo a muchos GRADASSI, lo desbancó. En efecto la Liebre 1 y 1/2 del cordobés, que estrenaba nuevo múltiple confeccionado por PIAZZA en su motor Ford, estaba dando los primeros frutos. Los otros V-8 del óvalo quedaban prontamente fuera de carrera, ante los abandonos de PAIRETTI y FERNANDINO. Cañonera rota y manguera de agua, fueron las causas.
Los únicos en condiciones de discutirle la cosa a los poderosos Tornado, eran entonces GRADASSI y BEGUERIE.
Un grande que volvía a correr en esta carrera, era el "sapito de Venado Tuerto": Marcos CIANI, lo hizo a bordo de un prolijo Valiant IV. Quedó prontamente afuera de carrera también. Manifestó que solo vino a probar su auto.
La ventaja de GRADASSI, se diluía en el llano. Allí COPELLO lo aventajaba lo suficiente, como para también tener controlado a DI PALMA. En ese primer giro anduvo muy fuerte el "mono", Alberto BEGUERIE. Pero un exceso reconocido por el mismo, lo llevó a pegarse de frente contra la montaña. El hombre venía pegado a GRADASSI, y a pesar de la polvaredad de éste, intentó pasarlo, y no vió el obstáculo. El mendocino MANZANO, se llevó puesta una piedra, y eso lo alejó de la lucha por la vanguardia.
Claro que uno busca en una carrera, un buen número de participantes. Capilla del Monte, fue la excepción. A partir de la tercera vuelta, solo quedaban 9, pero los cuatro de adelante, fueron levantando permanentemente el interés por la carrera, dada la lucha que mantenían por la punta.
Ya en el epílogo de la carrera, venían DI PALMA y COPELLO palmo a palmo, en una lucha bien cerrada. En la última vuelta, DI PALMA pierde la ventaja de 10" que le llevaba a COPELLO, al perder una rueda. Así GRADASSI, llevará su Liebre-Ford al puesto de escolta. PERKINS completaría el podio, y un jovencito de Chivilcoy, Juan María AYARZA GARRÉ, terminaba cuarto con su Liebre 1 1/2-Tornado.
Asi finalizaba otra carrera del TC "B", donde en el campeonato de montaña, mandaba el "maestro" sanjuanino. Asimismo, continuaba la serie invicta del Tornado, que a esta altura sumaba 17 victorias consecutivas en la categoría.
