La segunda de aquel 1971 se iba a disputar en el circuito semi-permanente de "La Cumbre", en la mediterránea Provincia de Córdoba. Un recorrido de 19 kms. por , vuelta, sumado el ya histórico fanatismo de los cordobeses, que desde las 6 de la mañana de aquel domingo hacían colas que se medían en kms. de autos, para tratar de llegar a los sectores habilitados para ver la carrera, haciendo los tradicionales asaditos, o chivitos, mientras disfrutaban del consabido espectáculo al paso de las máquinas.
En esta segunda fecha, a diferencia de la primera, hubo una concurrencia masiva de pilotos. Gran parte de la razón de esto último, se debe a lo sinuoso del trazado que en teoría emparejaría las chances de los productos de BERTA, con los demás. Claro, que no pensaron en quién podría neutralizar las condiciones naturales de un "intratable" Luis Rubén DI PALMA.
Entre el resto de los participantes, se destacaba el campeón 1970 de S.P., Néstor Jesús GARCÍA VEIGA; MALNATTI y varios nombres más de peso como FANGIO o CUPEIRO.
Las predicciones de un gran espectáculo se cumplieron, destacándose el duelo de la batería final entre Cacho FANGIO y CUPEIRO, que hicieron un tándem que mantuvo en vilo a la concurrencia. Cacho había mostrado en la batería inicial que su Dodge, preparado por la pena "Línea 2", estaba para pelearle al propio Luis, llegando incluso a puntear en la primera batería. Pero finalmente CUPEIRO iba a desertar por exceso de temperatura, y el hijo del quíntuple por la rotura de la cadena de distribución.
La final fue un paseo tanto para DI PALMA, como para su escolta César Horacio MALNATTI. El auto de éste último, que atendía D'ÁNGELO, era el más rápido luego del producto de BERTA del rubio piloto de Arrecifes.
Un regular Gastón PERKINS arribó en tercer lugar, merced al abandono de quiénes lo precedían. Al Torino del piloto de Alberti, le hacían falta algunos kph más para terciar en la lucha por la punta. Otro conforme al final, fue Carlos MARINCOVICH, también con Torino. El mejor no-Torino, fue Omar MURA CUVERTINO, con un Dodge Polara, que arribara 5| finalmente. Lo siguió el solitario Ford de MATÍAS, tras el cual arribaron todos productos de Santa Isabel.
A pesar de su abandono, sumó la presencia del Chevy de la comisión de carreras de General Motors, a cargo del "nene" GARCÍA VEIGA.